Homenaje a Aledrandro Casona por Carmen Salgado Romera (Mara)


EL PESCADOR Y LA SIRENA

Algunas noches de luna
si la niebla envuelve el puerto
se oye en toda la isla
un canto de mar adentro.


Una sirena cantaba
en su gruta custodiada
por el guardián de la puerta
que siempre cerrada estaba.


Al atravesar la niebla
perdió de vista su isla
el pescador que navega.


¿Cómo una sirena puede
con un solo gorgorito
alejarme de la isla
que me conoce de niño.?


¿Dónde está mi mar de siempre
con sus aguas azuladas
y sus olas de coraje
que resuenan en la playa.?


La ninfa se puso triste
su canto tornó lamento
cuando el marino gritó:
“Es un silbido del viento”.


La barca encontró camino.
El pescador soñoliento
pudo llegar a su isla
con el corazón contento.

Mara (Carmen Salgado Romera).