Homenaje a Machado por Mª Luz

Hola D. Antonio:

Somos un grupo de amigos escritores que queremos rendirle homenaje.

Alguno de nosotros ha nacido o vivido en esa tierra castellana que usted tanto amó.

No tenemos una tertulia de bar.

Ya quisiéramos.

Nos comunicamos a través de una máquina que no llegó a conocer.

El ordenador.

Imagine una mezcla de máquina de escribir y cinematógrafo.

Teclas y pantalla que nos acercan el mundo a la sala de estar.

Las cartas llegan con sólo tocar una de esas teclas.

Accedemos a museos, diccionarios, santuarios, prostíbulos, tierras y mares.

Volamos sin volar.

La noche pasada, en no más de una hora, viajé de Soria a Colliure.

Allí siguen sus caminos.

Sobreviven al tiempo y a las obras públicas porque aún hay pies que los recorren.

Los pies de los que gustan escuchar el ruido que hace la hierba al crecer.

Las campanas no han dejado de dar las horas en las torres de los pueblos

y la gente espera al anochecer el crotorar de las cigüeñas.

He visto los olmos

y las golondrinas jugando.

A pesar de la contaminación feroz.

Eran casi las nueve cuando llegué a Colliure, D. Antonio.

El mar insistía en acercarse a las piedras milenarias.

Me recibieron callejones empinados con geranios en los peldaños.

Colores muy alegres en barcas y fachadas.

Y su tumba.

Al entrar, a la derecha en el pequeño cementerio.

Vestida con la bandera republicana.

Cubierta la lápida con pétalos, con recaditos sujetos por piedras.

Su nombre.

Y el de su madre.

Piedra y cemento remozados por suscripción popular.

La máquina moderna me enseñó también fotos.

Espléndida, la belleza de Guiomar.

Gana usted mucho sin sombrero.

Vi su último recorrido entre nosotros.

A hombros de milicianos catalanes.

La soledad digna del ataúd reposando sobre dos sillas.

Parece que descansa usted, D. Antonio.

Acompañado, como bien decía en aquel verso furtivo,

por estos días azules y este sol de la infancia.

Mecido por el mediterráneo.

Usted, que navegó cien mares

y atracó en cien riberas.

Reciba un fuerte abrazo

y nuestro respeto.