Noticia: Que no se repita por Ana Alonso


Primero la Noticia y a continuación el comentario.

La mujer de Del Valle pasará hoy a disposición judicial
Isabel ha sido interrogada tras declarar en televisión que fue su marido el que acabó con la vida de la niña
[Imagen tomada de un monitor de TV de la mujer de Santiago del Valle, Isabel García(d), realizando unas declaraciones en directo en un programa de televisión de esta mañana en las que acusa a su marido de la autoría del asesinato de Mariluz Cortes.]
EFE / MADRID Isabel García, la mujer de Santiago Del Valle, acusado por el asesinato de la niña Mari Luz, será puesta en la mañana de hoy a disposición judicial tras pasar esta noche en dependencias de la Policía Nacional, ante la que ha prestado declaración después de asegurar en televisión que su marido mató a la pequeña.
Así lo han confirmado a Efe fuentes policiales que han precisado que Isabel García ha prestado declaración en la Comisaría General de Policía Judicial tras lo cual ha sido trasladada a otras dependencias policiales en Madrid en calidad de detenida para tomarle las huellas dactilares, fotos y recoger los parámetros pertinentes para su reseña policial.
La esposa de Del Valle pasará la noche en los calabozos de esas dependencias policiales y por la mañana está previsto que sea trasladada a los juzgados de Plaza Castilla de Madrid junto al resto de detenidos hoy en Madrid, según las citadas fuentes.
Isabel García ha ido a declarar en la mañana de ayer viernes ante la Policía de forma voluntaria, según han indicado las mismas fuentes, que han precisado que la mujer se ha trasladado hasta el complejo policial de Canillas de Madrid acompañado por periodistas de "El programa de Ana Rosa" de Telecinco, en el que se han emitido unas declaraciones suyas en las que ha asegurado que su marido "se cargó a Mari Luz".
En el citado programa de televisión, Isabel García se ha retractado de su declaración del pasado día 16 ante el tribunal que juzga el caso del asesinato de la niña, donde inculpó a su cuñada, y ha vuelto a sus primeras declaraciones ante la Policía y en los juzgados en marzo de 2008.
Isabel García ha comentado en el programa que fue su marido el que acabó con la vida de la niña, pero que fue "accidentalmente, no fue a propósito, simplemente se le escapó".
Las declaraciones de la esposa de Santiago han coincidido con el final del juicio por el caso del supuesto asesinato de la niña, que se ha celebrado en la Audiencia de Huelva y en el que Santiago y Rosa del Valle, los dos acusados del crimen, se han declarado inocentes.
Santiago del Valle, al igual que Rosa, ha manifestado que está de acuerdo con todo lo expuesto por su abogado y ha apuntado además: "soy inocente y pido justicia, pero en el juzgado".
Unas 500 personas han participado esta tarde en una concentración a las puertas de la Audiencia Provincial para mostrar su apoyo a la familia.
El padre de la menor, Juan José Cortés, se ha dirigido después a los periodistas para decir que seguirá luchando para que lo que le ha ocurrido a su hija "no vuelva a repetirse".
                                                             

He escogido esta noticia por muchos motivos.
La terrible e injusta muerte de Mariluz, cuyo delito fue ser niña, una niña hermosa y feliz, cualidades éstas que la convitieron en una presa apetitosa para su presunto asesino: un pedófilo declarado y condenado.
Presunto asesino, si, pero no sólo porque la presunción de inocencia es un derecho para cualquiera, sino también porque los enredos familiares embrollan tanto la historia que en ésta familia se culpan entre si, se autoinculpan, se acusan y se disculpan que al fin, lo dicho, la culpa de la víctima, por ser niña, hermosa y feliz.
La justicia, la tremenda maquinaria judicial de éste país, dejó que se colara por entre las rendijas de las montañas de tediosos y pesados expedientes, la libertad para su presunto asesino. Eso sí, por esa falta, la sanción no recae en el sistema judicial, en la falta de medios o personal, en el exceso de burocracia y trámites redundantes, ni siquiera en la persona del juez, si no que se expedienta a la secretaria del juzgado.
Y en medio de todo este circo, aparece Ana Rosa Quintana. La reina de los bazofiomatinales con un espectáculo de lo más lamentable todavía. En una pirueta inconcebible nos ofrece el testimonio desgarrador y en directo de la esposa del presunto asesino, un testimonio que ni la policía ni toda la plantilla de agentes judiciales, supieron o pudieron hacerle confesar.
¡Qué asco! Solo puedo sentir asco. El día que un canal de televisión no emita basura de éste tipo, imágenes impactantes de accidentes de aviación o de tráfico o de trenes, comentarios más o menos creíbles recogidos mediante cámaras ocultas, retransmisiones de realidad que me llevan a preguntarme de dónde sale esa gente, reportajes sin corazón de nuestros mundos de miseria, drogodependencias, pobreza y locura sin un ápice de orientación solidaria o de concienciación… ese día… ese día… (podría hacer cualquier promesa casi con la seguridad de no tener que cumplirla nunca.)
Y sobresaliendo entre todo este montón de estiércol mediático, Juan José Cortés, el padre de Mariluz. Un gitano cabal, templado y lúcido que resplandece en medio de tanta mierda. Un padre que sólo quiere que lo que le pasó a su hija, no se vuelva a repetir.