Alter Ego de Pilar Torres Serrano



TEMA CERO. ALTER EGO

         Soy un ser mitológico. Me llamo Ave Fénix. Cada quinientos años resurjo de mis cenizas con más fuerzas.
         Mis ancestros se remontan al mundo egipcio pero al día de hoy estamos repartidos por todo el globo terráqueo. Yo, en concreto, nací en Oceanía. Me encanta viajar y ya he dado tres veces la vuelta al mundo. También me gusta la política y por ello, formo parte de la Asamblea General de Aves Fénix con sede en Bruselas.
         Soy un ave alegre y arriesgada. Me enfrento a mis peores enemigos, los buitres leonados, cuando tengo que defender causas justas.
         En las cumbres de las montañas revoloteo dejándome llevar por las corrientes del viento y gozo haciendo vuelos con altiplanos caseros.
         El cometido mayor que mis padres me asignaron al nacer, dice nuestro protagonista, fue ayudar a sobrevivir a las personas que hubieran tocado fondo en la vida.
         Ayer mismo, me encontré en la acera con un vagabundo que pedía limosna. Encarecidamente solicitaba una ayuda y parecía un hombre que acababa de dejar una vida normal por la manera de vestir, de hablar y de comportarse. Le pregunté por qué se encontraba en esa situación y me respondió apenado que había quebrado su empresa, que los amigos y la familia le habían dado de lado y por eso decidió vivir en la calle, lo había perdido todo en cuestión de pocos días.
         Una vez que escuché a este pobre hombre alcé mis negras plumas abarcando su cuerpo y proporcionándole calor intenso. Entonces, súbitamente se levantó de un salto, tiró el litro de vino que llevaba en la mano derecha y me dijo que iba a cambiar de actitud, que él no era responsable del fracaso, de su desdicha, sino la coyuntura económica. Se volvió a sentir una persona digna consigo misma y corrió a llamar a su hijo mayor que no le había traicionado. Luis, su hijo, al ver a su padre en una actitud positiva se emocionó y le invitó a que fuera a instalarse en su casa junto a su familia y le animó a fundar con el tiempo otra nueva empresa, recordándole lo buen empresario que siempre había sido.
         Entonces, de mi interior, salió una luz muy potente de color rojo que se estrelló junto al cuerpo de Pedro, que así se llamaba el vagabundo. Finalmente, ambos nos  despedimos, no sin antes darme las gracias por el apoyo recibido.
         Mi fortaleza es inagotable y está siempre orientada hacia el bien. Además, soy hiperactivo por lo que mi capacidad de trabajo es inagotable. No se conoce, hasta este momento, ningún caso de Aves Fénix que se desplazaran hacia el mal. Somos aves heroicas capaces de cambiar los acontecimientos terrícolas como acabamos de ver.
         Nos  adecuamos a todo tipo de climas y temperaturas, pues nuestra fuerza nos permite pasar varios días sin beber o sin comer. Únicamente presentamos un punto débil, un talón de Aquiles, consistente en que si llegamos a tener descendientes con miembros directos de la familia, cuando nacen los polluelos, los padres nos desintegramos y ya no resurgimos de nuestras cenizas. Esta es la razón que ha motivado que desde Australia haya decidido viajar hasta España para procrear con otros congéneres de distinta familia. Es pura selección natural. En primavera nacerán dos polluelos negros con la fuerza y resiliencia de nosotros, sus padres.